Durante su adolescencia, una por entonces inquieta Angelique Kidjo no vivía para otra cosa que no fuera escuchar, descubrir e incorporar música. Sus héroes eran casi todos negros y casi todos ellos gozaban del estatus de celebridades del mundo de la música. En su Benin natal, Angelique mezclaba esos discos que tanto amaba con el sonido de fondo de los tambores regionales, esos que resuenan en casi toda África para terminar perpetuándose en el ADN musical de cada uno de sus habitantes.
Muchos años después, una Angelique bastante mayor parece haber decidido regresar a aquellos tiempos iniciáticos y volcar todo su amor por la música con la que creció en el flamante Oyo, su nuevo y más que respetable trabajo.
Así aparece una tremenda versión de Move On Up, la súper conocida canción de Curtis Mayfield, que Kidjo interpreta a dúo con el mismísimo y multipremiado John Legend. También figura una relectura de Samba Pa’ti, de Carlos Santana, que toma vuelo con la trompeta de Roy Hargrove. Hay más: Angelique se mete a fondo con el clásico de Otis Redding I Got Dreams To Remember y con Baby I Love You, popularizada por Aretha Franklin: el dúo con Dianne Reeves no es algo que suceda todos los días.
Entre las conexiones africanas que matizan este recorrido por el jazz y el soul de los dorados setenta se luce sobre todo Zelie, compuesta por Bella Bellow: ni esta hermosa canción ni ninguna de las otras tiene demasiado que envidiar a los hits ya conocidos.
Un gran álbum que funciona a modo de diario íntimo mientras proyecta la carrera y la voz de la Kidjo hacia el futuro.