En tan sólo un año, la banda andaluza ha conseguido a base de talento, inteligencia y esfuerzo algo que a muchos les llevaría una década: llamar la atención y justificarlo con grandes canciones de pop atemporal.
La fórmula la revivió parte del brit-pop de principios de los 90: para presentarse en sociedad, nada mejor que generar expectativa. Eso hizo Suede, por ejemplo, que publicó dos EP incendiarios previos a su debut; y eso mismo hizo el año pasado Supersubmarina, cuya trayectoria hasta llegar a este álbum debut ha sido ejemplar. En enero de 2009 publicó su primer EP, Cientocero, con cuatro canciones; y en abril del mismo año lanzó un segundo EP, Supersubmarina, con la canción que le daba título como tema estrella.
Su llamada de atención estuvo acompañada de un vídeo que participó en distintos festivales nacionales —V Edición del Festival de Cine Español de Málaga y Festival de Cortometrajes de Mieres 2010— e internacionales —Festival Internacional de Videoclips en Comunidad Camon 2009 e Interfilm Short Film Festival de Berlín 2009. Durante este periodo ofrecieron más de setenta conciertos por toda España en más de cincuenta ciudades. Lo dicho: con su plan en marcha, todos esperábamos ansiosos el flamante Electroviral, un primer disco que finalmente llegó y no decepciona en absoluto.
¿Cómo clasificar sus canciones? Afortunadamente no es tarea sencilla. ¿Pop en llamas? ¿Rock energético? ¿Música moderna que combina músculos con prácticas de laboratorio? Un poco de todo, y más también. La banda de Baeza, Jaén, ya está en boca de todos, y bien merecido que se lo tiene.