La historia de amor y confusión entre un niño y una niña es el argumento central del nuevo filme de la directora argentina bendecida por Almodóvar.
El último verano de la Boyita es una película rural, ambientada en los campos de la provincia de Entre Ríos (Argentina), donde el río todo lo domina y la calma es un bien que casi nunca se ve alterado por nada. Pero más allá del impecable trabajo de cámaras y del clima tonificante que despiden sus imágenes, lo más interesante es que aquí se narra el romance de una niña con un niño, sí, justo en el punto en el que la inocencia llega a su fin.
Es, además, la segunda película de Julia Solomonoff —la otra fue Hermanas (2004)— quien la estrenó hace unos meses en Buenos Aires. Para quienes no la conozcan, mencionar que esta directora nacida en la ciudad de Rosario en 1968 ha conseguido para este flamante nuevo filme la coproducción con la compañía El Deseo, propiedad de los hermanos Pedro y Agustín Almodóvar.
Una interesante historia de amor y de aprendizaje, en manos de una realizadora elegante y con mucho, muchísimo futuro.