Qué: disco (edita Crying Bob)
Porque a veces la capacidad de conmover está durmiendo en alguna parte del alma, esperando a ser despertada de golpe. Algo así le sucedió a Markus Berkvist, el hombre que hoy toca su guitarra y su bombo para terminar conmoviendo cada vez que abre la boca y surge su voz. Su epifanía ocurrió en el entierro de su padre, cuando su madre le pidió que cante algo en su memoria y Markus descubrió un nuevo modo de emocionar. El resultado es su álbum de debut, una obra tan delicada como conmovedora de parte de un artista sueco que, sin embargo, aprendió a conmover con un lenguaje universal: el genuino.