Minerva aterriza en el rock nacional con armas mortíferas de necesidad para los aficionados a categorizar. La música de Miriam Brunet es magnética, y se apoya en una capacidad vocal sin parangón entre sus pares españolas.
Qué: Disco (independiente)
La zaragozana Miriam Brunet empezó a llamar la atención allá por 2003 como vocalista de la agrupación Bronski. Hace unos años armó el proyecto pararelo Minerva, su propio invento, en el que canta, compone y toca la guitarra: debutó discográficamente con Antes de dormir. Ahora viene con una propuesta oscurecida, cercana en predicamento a PJ Harvey (influencia confesa) o Cat Power, con guitarras que muerden y juegos vocales que transportan, dibujando un contexto endiabladamente atractivo. El single de apertura, Grietas que correrán, es muy ilustrativo a la hora de hacerse con la mística de su autora. Miriam pone letras a sus pesadillas, como en Domingo, y también a las emociones que llegan, como en el corte El único lugar. En directo, Minerva se nutre de músicos de Big City y Sheriff, bandas hermanas (comparten incluso local de ensayo). Rafa Domínguez, de Guisante, se ha encargado de la producción en La Cafetera Atómica, demostrando una vez más su capacidad para sacarle jugo al talento que visita sus instalaciones.
