Esther Pizarro propone este espacio en miniatura que recrea el archipiélago nipón y los simbolismos propios de cada región, e invita a la interacción con el visitante.
Qué: Exposición
Cuándo: Del 1 de febrero al 20 de abril
Dónde: Madrid (Matadero)
El año dual España-Japón 2014 tiene en este proyecto de la escultora Esther Pizarro –que el año pasado impactó con su instalación Mapas de Movilidad: Patronando Madrid– una nueva manifestación plástica. La Nave 16 de Matadero Madrid alberga desde este fin de semana una recreación de un jardín japonés, proyecto comisariado por Menene Gras Balaguer. Se trata de un espacio que invita a la contemplación imitando la naturaleza que trata de reproducir en miniatura, pero a la vez compartiendo códigos estéticos con la caligrafía, el arte y la tradición. Un paseo refrescante que sublima el lema «una imagen vale más que mil palabras». Todos los componentes que forman parte del jardín japonés importan un simbolismo y unas normas, como si fuera una especie de alfabeto o libro de claves. Matadero Madrid y Casa Asia se han unido para crear este archipiélago que sirve a la perfección de panel de información condensado. Es un jardín seco rodeado de un mar de sal, en el que las ocho regiones se han convertido en islas, con caminos entre ellas para que el público pueda desplazarse como por el interior de un organismo vivo, a imagen de la Naturaleza en cada una de sus representaciones.