Los prometedores donostiarras se estrenan en formato largo con un álbum en castellano (el inglés en el que se iniciaron, de momento, queda aparcado) producido por Abel Hernández, de Migala.
Qué: Disco (edita Subterfuge)
Llegó el día. Pocos grupos han generado tanta expectación previa a su álbum de debut en los últimos años dentro del alicaído panorama de la industria musical española. Tras un par de avances, Bailamos por miedo se exhibe finalmente en todo su esplendor. Joe la Reina (genoma donostiarra, larga residencia en Pamplona) desembarcan con un arsenal más que efectivo: punto melancólico, letras que inician fuegos en la mente y las entrañas de quienes las escuchan, actitud y desenvoltura. En el estudio, además, contaron con la sabia guía de Abel Hernández, artesano de la factoría Migala, para dimensionar todo lo posible las virtudes apuntadas en su EP iniciático Change Of Masks (2012), que hizo activar los radares de la parroquia indie nacional. Abel produjo lo último de McEnroe, con quien giró Joe la Reina, y la calidad de aquel trabajo acabó de convencer a los donostiarras para marcar su teléfono. La banda tiene a Dylan y Leonard Cohen como sus lares predilectos del hogar, pero también rinde pleitesía a creadores tan dispares como Mikel Laboa, Pink Floyd o Blur.
