La directora neoyorkina retrata la Cuba de hoy con el anhelo de medio siglo: escapar hacia Eldorado y buscar una vida mejor, alejándose de esa Habana hechicera que enamora y oprime a un tiempo a sus moradores.
Qué: Película (estreno en España)
El principal problema de los ojos extranjeros al analizar fílmicamente la realidad cubana es caer en los estereotipos, quedarse en la superficie y no ir más allá de un par de golpes efectistas. Lucy Mulloy (la película fue candidata a mejor montaje en los Spirit Awards de 2013) sabe combinar el cuidado de la estética, el ritmo de narración y la pátina de autenticidad a la hora de contar una historia relatada mil veces: el balsero que se lanza a las noventa millas de mar cruel hasta la añorada Miami. Esta vez son tres muchachos los que tratan de alcanzar su sueño, que en este caso viene dado por le necesidad de huir ante un problema legal. Mulloy retrata fielmente la Cuba de hoy, una isla que oye rap y guapea con las medicinas y vende de todo en la calle, algo que antes sólo se hacía a escondidas. El filme no ahorra escatologías, dramas, violencia policial, alusiones crudas al sexo de pago y continuidad del turismo más indeseable. El tono es crítico, pero caló en Cuba y con toda seguridad lo hará en España.
