Hace un porrón de años, Antonio y Jorge (que llevan tres lustros desafiando intelectos) versionaban a Bob Marley en japonés. Ahora se ponen hillbillies con Perales, y la orquesta Pinha les ayuda en directo registrado. Carisma envasado con éxito.
Qué: Disco (edita Granja Beat)
Describir el flow de Dwomo es contraproducente. Cualquier cosa que pueda decirse para encajar su música en algún nicho conceptual es un esfuerzo baldío, rayano en la osadía y el patetismo. Resulta mucho mejor darle al play y disfrutar. Hay poca gente en el mundo que se tome tan en serio lo de hacer el idiota, lo cual garantiza la atención inmediata de los que descubrieron en algún momento de sus vidas lo beneficioso que resulta reírse algo más de lo necesario. Redemption Song en japonés suena de maravilla: ellos lo demostraron tiempo ha. Lo mismo puede decirse de la revisión de Perales inspirada en los osos montañosos de Hanna-Barbera, invento que ya han pulido con éxito en Zaragoza Los Hillbilly Mongows. Dwomo lo borda. Sigan en hilo: si conocen el idioma de Shakespeare, podrán seguir la pista al barco llamado Libertad. Mientras tanto, y con la complicidad de La Orquesta Pinha (Fernando Polaino es el eslabón perdido entre ambos colectivos), descubrirán lo bien que funciona en directo el repertorio de Dwomo, carente esta vez de su componente androide. Por ahí asoma el swing, la polka, el klezmer e incluso el vals: la música que brota de esta entente cordiale puede pintar cualquier situación. Por algo son tan cinematográficos los muchachos.
