Tras un disco de cantautor, el músico argentino que mejor interpreta las vanguardias sonoras regresó con un álbum tan extraño como su propia trayectoria. Música bailable para fiestas sin gente, letras existencialistas y un manejo notable de la ironía retórica.
Qué: Disco (edita Ultrapop)
Nunca, en ningún caso, conviene ser ingenuo al momento de enfrentarse con un nuevo álbum del indescifrable y notable músico, productor, compositor y cantante argentino Daniel Melero. Menos aún cuando las claves están al alcance de la mano, como es el caso de su nuevo trabajo, titulado simplemente Disco. Porque alcanza con pulsar «play» para comprender que Melero lo hizo una vez más: escogiendo un género tan tentador y legendario como la música disco, y como ya lo ha hecho en ocasiones con el folk, el pop, el tecno y tantos más, profesa su amor hacia un estilo, al tiempo que parece burlarse de él expandiendo sus límites. Quizás el mejor ejemplo sea la canción Dudas, que incluye hasta las cuerdas prototípicas de grupos de como Electric Light Orchestra. Pero más allá de la «víctima» del momento, ahí están los textos del autor argentino, quizás uno de los letristas más exquisitos y atrevidos del rock local. También queda claro que su primer amor son, fueron y serán los sintetizadores, esos aliados que acompañaron sus primeros pasos con el grupo Los Encargados y que hoy vuelven a tener un protagonismo clave, como sólo Melero les puede ofrecer.