Tras darse a conocer en 2012, Macho vuelve con nueva criatura. Un álbum movedizo en el que no falta ni uno solo de los ingredientes que hicieron de su primer trabajo un disco redondo: alto voltaje, provocación y espíritu de baile. Novedad: ahora son tres.
Qué: Disco (edita Bankrobber)
Tras su debut homónimo y estrenando alineación (la banda se presenta ahora como trío), Macho publica un segundo y adrenalínico disco bajo el título de Aturuxo vudú, con buenas dosis de garaje, alta tensión y rasgos de blues entrelazados siempre con rock como fundamental materia prima. Visto el buen resultado de su trabajo anterior se entiende que la banda haya optado por la misma fórmula y por ello en este álbum no faltan las melodías salvajes ni el espíritu bravío: Enfermera, La canción del oso que mira o Sale el sol (Bambalú bambalú) –alto voltaje con el que se abre el disco–, son piezas claves que valen como ejemplo. Ramón Faura (guitarra y frontman) explota nuevamente la singularidad de su voz que, combinada con frenéticas guitarras y teclados que evocan músicas de otros tiempos, estimula al baile como respuesta prácticamente cinemática. Inyección muy bárbara la del trío.