El otoño es una temporada de novedades y también de sorpresas en España. Una de las últimas del indie local es Acuario, el proyecto en solitario de Leo Mateos del grupo Nudozurdo, que ofrece canciones pop con base electrónica y un gusto exquisito.
Qué: Disco (edita Marxophone)
Cassette. La portada con teclados y colores chillones. El sonido. Las voces. Todo lo que rodea a Acuario, la presentación en solitario de Leo Mateos –cantante y líder del grupo madrileño Nudozurdo–, tiene que ver y mucho con los años ochenta. Al estilo de grupos foráneos como Twin Shadow o John Maus, Acuario tira de aquel sonido retro y analógico del tecno pop de los primeros ochenta pero actualizado a nuestros días. Grabado con herramientas y viejos sintetizadores de la época (Yamaha, Roland, etc), Cassette para los niños es un disco que se inspira en la imaginería de aquella época, la ciencia ficción y la inocencia, para firmar once canciones de aire retrofuturista y letras ensoñadoras con títulos como Supemutaciones, Bárbara bit o Naves dormidas, primer single del álbum que ha editado recientemente el sello Marxophone. Como dice la nota de prensa, «bienvenidos a la nueva era de Acuario».