En 2011, contra todo pronóstico, Alfonso André decidió dar vida a una carrera como solista luego de haberse afianzado como uno de los bateristas más sólidos del rock mexicano, tocando con Caifanes, Jaguares y La Barranca. Ahora, el músico regresa con un segundo trabajo en el que se revalida como frontman.
Qué: Disco (edita Prodisc)
Desde su primer álbum como solista, Cerro del aire, Alfonso André dejó claro que si daba ese paso en su carrera, lo haría de la mejor manera: respaldado por los muchos músicos que han estado a su lado en distintos momentos de una trayectoria innegablemente productiva, como Federico Fong, Chema Arreola y Cecilia Toussaint. Además, dejó claro que la decisión sería tajante: se asumiría como vocalista, dejando la percusión a cargo de otros instrumentistas.
Mar rojo, su segundo disco, parece detonar del deceso de su padre y es en ello que adquiere un tono personal y en cierto modo luctuoso. «A la memoria de mi padre. El dédalo de mi historia personal. El arquitecto que me enseñó a construir mis alas. Te has ido, pero seguirás por siempre vivo en mi corazón y en el de tantos otros que tuvieron la fortuna de conocerte», escribe André en los créditos del CD. Tormenta, el cuarto tema, es uno de los que parecen salirse del tono melancólico que domina al álbum, una canción que avanza a paso trepidante, arropada por guitarras que no escatiman en exhibir su potencia. El sol saldrá es quizás la que en mayor medida comunica el aire de nostalgia por el que transita André ante su pérdida: «Hueco en el alma/ Tengo un ardor en la memoria/ La penumbra ya no reinará», canta con una voz que augura alivio. Brisa es una balada de trazos acústicos y aire lastimero cuya letra habla metafóricamente de la fugacidad de la existencia. Ese lugar atrapa por las secuencias y efectos que salpican su melodía y que le dan una personalidad muy particular. Y Puedes dejarme atrás ejercita la fuerza que André consigue dar a ciertas canciones, equilibrando los estados de ánimo de un disco que no oculta la diversidad de registros por los que él consigue moverse con soltura, inventiva y convicción.