El festival indie del Alto Aragón cumple diez años, con Iván Ferreiro, Sidonie, Maga, Steve Smyth y Bigott como principales atractivos del cartel. Comienza Polifonik Sound en Barbastro.
El Somontano es zona de vinos, una de las denominaciones de origen españolas que más se ha expandido en la última década. En ese mismo lapso de tiempo, el Polifonik Sound ha caminado el ilusionante trayecto que empieza en aquello de la locura de unos amigos, toma forma poco a poco y acaba convertido en un joven clásico.
Diez ediciones contemplan a esta apuesta por la independencia gestora y creativa en el pop (sobre todo) y el rock; este año, el gallego Iván Ferreiro es uno de los reclamos del programa, que también incluye a Sidonie (otro caso de jóvenes veteranos en pleno momentazo), Maga y su exquisito nuevo álbum, Full, el australiano Steve Smyth (único anglo del cartel, aunque ahora tenga su base de operaciones en Barcelona: es una maravilla, por cierto) o Bigott.
Este último, zaragozano y mostachudo, juega en casa; lo suyo es cuestión de paradoja, ya que ha convertido en cotidiana su capacidad de sorprender. The Fire Tornados, El Verbo Odiado y Valparadiso representan a los nuevos vientos en la escena aragonesa dentro del festival, que también contempla un concierto exclusivo de Mikel Erentxun en una bodega, distintas formas de mejorar la circulación de la sangre (Varry Brava, Delafé, Amatria) y algo importantísimo; el buenrollismo. El Polifonik acuna a sus visitantes. Déjense hacer.