Chelo Scotti, artista argentino radicado en Hamburgo, publica Cuartetrónica, un EP que mixtura el folclore cordobés llamado «cuarteto» con minimal tecno y UK bass. El resultado es un sumum de colores que obliga a poner con urgencia los pies en la pista de baile.
El cuarteto, el género musical más difundido de la ciudad de Córdoba en Argentina, remite a una historia de siete décadas y nace de la fusión de ritmos latinoamericanos y una herencia sonora de inmigrantes europeos. «La Mona» Jiménez y «El Potro» Rodrigo son sus referentes populares, aunque si miramos de cerca, la historia releva grandes orquestas como Chébere y Trulalá. Se baila de a dos o en grupo, se transpira y canta con pasión desenfrenada.
Chelo Scotti fue parte de la incipiente escena alternativa de los 90 con el grupo de metal industrial Hang Over y como DJ, par de otro número puesto en la escena electrónica mediterránea: Andrés Oddone. Juntos tocaban house, tecno y drum’n’bass, hasta que en 1999 Scotti se trasladó a Hamburgo y durante diecisiete años fue residente del clásico Golden Pudel Club. Editó los álbumes Tiempo (L Age d’Or/Ladomat), Transitions (Uritorco Records) y hoy es parte de la Cumbia’n’Bass Family y residente del Sommersalon.
Cuartetrónica diseña con sampleos una exquisita combinación de sonidos característicos del cuarteto (algo solapados), y en consonancia con el fulgor popular, fue compuesto en el barrio St. Pauli de Hamburgo. En consecuencia, Gassi St. Pauli es una suerte de intro en la que apenas se distingue el ritmo del 2×2, que es expuesto en su faz más clásica en Cuartetrónica; mientras que Ramba Zamba percute al son de la UK bass hasta que los vientos colorean la apuesta. Finalmente Volver al futuro, ahora es la versión más latina del cuarteto, disuelta en beats presurosos que obligan al contoneo sexy. ¡Corramos ya a la pista de baile!
