Morrostock, uno de los festivales rurales más importantes de Brasil, celebra sus diez años de vida con una edición donde el folk y el rock conviven con propuestas psicodélicas y neohippies. Todo ello apostando por un modelo social acogedor y sin depender de patrocinadores corporativos.
Que los festivales en el campo sean una tradición para el rock se lo debemos en gran parte al primer Woodstock, realizado en aquel lejano 1969. Sin embargo no hace tanto que este tipo de eventos llegaron a Brasil. Morrostock surgió en 2007 en los alrededores de la ciudad de Santa Maria (Estado de Rio Grande do Sul), y aunque no haya crecido tanto como su «pariente» más famoso, el catarinense Psicodália, sí que consiguió consolidarse con su personalidad, combinación de comunidad libre, música psicodélica y retiro rural.
Sin patrocinadores corporativos, el festival que se lleva a cabo en el Balneário Ouro Verde, promueve acampadas, talleres de los más variados –desde terapia bioenergética a ginecología natural– y actividades sobre sostenibilidad. Así, su propuesta podría definirse como neohippie, pero la programación musical –su elemento principal, con más de cuarenta actuaciones– presenta un abanico mucho más amplio.
Inevitablemente, la psicodelia tiene una presencia destacada y está muy bien representada por cabezas de cartel como Boogarins y los legendarios Os Mutantes (aunque mantenga un único integrante de su formación original: el guitarrista Sergio Dias Baptista), acompañados de otros nombres menos conocidos.
Pero más allá del delirio lisérgico, también podemos encontrar buen folk de la mano de Mulamba, agrupación feminista de Curitiba; Cuscobayo, quinteto de canciones fogoneras que se encontrará como en casa en los prados del Balneário Ouro Verde; Joe Silhueta, que llegará desde Brasilia con imágenes agrestes y más ligadas a la aridez del Planalto Central brasileño, Francisco El Hombre, infaltable este año en los grandes festivales, y la dupla Caramurú & Julião que recupera el sonido de la guitarra acústica y zabumba del nordeste pernambucano.
Además habrá presencia del exterior. Así estarán en Morrostock los uruguayos de Milongas Extremas, dedicados a reversionar las canciones de Extremoduro en clave milonga punk; Tamboorbeat y El Sonidero & Fanfarria Insurgente llegarán desde Argentina, Colleen Green desde Estados Unidos y Les Deuxluxes desde Canadá. Por su parte, el rock también tendrá representantes en el cartel con los locales Dingo Bells y Baby Budas, los cariocas Ventre y los curitibanos The Shorts.
Documental 10 años