Rosario Bléfari y Julián Perla, dos héroes del under porteño, acaban de unir fuerzas en Los Mundos Posibles. Su primer disco es lo más cerca que puede estar de la balada un brote argentino de la Velvet Underground.
Qué: Disco (Plastilina)
Muy lindo el disco de Kurt Vile y Courtney Barnett, pero también podemos mirar a los vecinos por el ojo de la cerradura. Ahí están, son Rosario Bléfari y Julián Perla: una de las heroínas del under porteño desde que fuese la voz de Suárez allá por los 90 y el líder de Mi Pequeña Muerte.
Ambos acaban de descubrir que no solo sus conversaciones sobre el amor fluyen sin obstáculo, sino también sus voces. «La explicación que le encontramos es que nuestras voces octavan perfecto –dice Rosario. Cantamos cómodos, en nuestro registro natural, a ocho notas de distancia».
La alquimia que producen es única, pero podemos trazar alguna analogía con Dean Wareham y Britta Phillips, el matrimonio detrás de Luna. La voz trémula de Blefari aletea alrededor del barítono anestesiado de Perla, que se entierra hondo en la tragedia de alcoba. «Voy a preparar café / empecé a extrañarte hace unas horas –canta en el arranque del disco. He tratado de dormir / repasé mil veces nuestra historia. / Como siempre».
Apuntalados por Javier Diz (batería, teclados, guitarra eléctrica), Los Mundos Posibles hace que todo suene elegíaco. No hay distorsión, pero no suenan folk en absoluto: esto es lo más cerca que puede estar de la balada un brote argentino de la Velvet Underground. El contacto, uno de los dos temas que cierran el disco, da ganas de llorar. Pero cualquiera, cuando extiende la mano para secar el rostro ajeno, se encuentra con el dedo seco. Y la lágrima, voilá, se convierte en sonrisa.
