Un hijo de militantes chilenos desaparecidos durante la dictadura reconstruye la historia de sus padres a la vez que indaga en el pasado reciente de su país. Un relato íntimo y emotivo sobre una tragedia familiar y nacional. Se estrena en Chile Venían a buscarme, de Álvaro de la Barra.
Qué: Película (estreno en Chile)
Los padres del director de esta película eran militantes revolucionarios en los años setenta, al igual que otros tantos jóvenes de todas partes del mundo que decidieron luchar por un mundo más justo. Después del Golpe Militar chileno encabezado por Augusto Pinochet al gobierno socialista de Salvador Allende en 1973, fueron asesinados en una emboscada en la esquina de la guardería donde asistía su hijo.
«Crecí en el exilio, clandestino y con la imagen heroica de mis padres como pareja y como luchadores sociales. Ahora yo busco recuperar mi identidad, intentando así conocerlos a ellos», explica el director Álvaro de la Barra quien, a partir de este filme, intenta reconstruir su historia familiar y, a la vez, reflexionar sobre la historia chilena reciente.
Así, este documental se enmarca dentro de la tradición de hijos de desaparecidos que exploran su propio pasado de un modo atípico, alejado de lugares comunes y formatos anquilosados. Algo similar a lo hecho en Argentina por Albertina Carri (Los rubios), Nicolás Prividera (M) o, desde la literatura, Félix Bruzzone (Los topos, Las chanchas, 76). En Chile, se emparenta con la obra literaria de Nona Fernández, quien indaga en estos tópicos en una de sus últimas novelas (La dimensión desconocida).
En el tráiler de Venían a buscarme, se ve al director dialogando con militantes y amigos que conocieron a sus padres y le aportan datos que ayudan a dilucidar aquella máxima atribuida a Confucio: «un pueblo que no conoce su historia está condenado a repetirla».