Un arquitecto sufre un particular trastorno que le ocasiona sueños prolongados y produce que los límites de la realidad se vuelvan difusos. Su mujer, su hija y el proyecto de construir una casa fuera de lo común corren riesgo de desaparecer. Se estrena en Argentina La casa del eco, de Hugo Curletto.
Qué: Película (estreno en Argentina)
Alejo (Gerardo Otero) es un arquitecto de treinta y seis años que viaja con su esposa (Guadalupe Docampo) y su pequeña hija (Gina Cavagna) a un lugar campestre en busca de una parcela de pinos que su padre le regaló para su cumpleaños. En el medio, sufre un extraño síndrome que le altera su capacidad de dormir y soñar. Su proyecto de construir una casa que produzca ecos en todos los ambientes, transportando casi de manera mágica la voz de los allí presentes por todas partes, funcionará como una alegoría de lo que le toca vivir: su realidad es un sueño y está presente en todas partes y en ninguna a la vez.
Esta película marca el debut en la ficción del realizador cordobés Hugo Curletto, quien había dirigido anteriormente documentales y cortometrajes (El imperio de los colores, Lobo está) y también es autor del guión. En una entrevista con el portal Escribiendo Cine explica sus intenciones narrativas: «La historia propone un relato fragmentado, que abre el sentido pero no para ser llenado por el espectador, sino para dejar al descubierto los huecos». Así, una subtrama onírica y fantástica se entrelaza con el drama familiar.
Sobre la inspiración para este filme, le comentó al diario cordobés La Voz: «La historia surge a partir del recuerdo de un lugar al que mi viejo nunca pudo o quiso llegar en medio de la montaña, y que siempre me resultó una incógnita. Los pinares maravillosos y hermosos de Alpa Corral (localidad cordobesa) me vienen de la infancia y al día de hoy no sé aún nada de ese lugar».
