El catalán Juan Vico publica su nueva novela El animal más triste, una reunión de amigos en la que las frustraciones y el vértigo de los años planean como una sombra sobre la francachela que pretende revivir sus años universitarios o, al menos, el recuerdo de lo que fueron, un recuerdo en el que ya no se reconocen.
Qué: Libro (edita Sex Barral)
«Omne animal post coitum triste est» es un proverbio latino que afirma que todo animal está triste después del coito, también es de donde viene a ser tomado el título de la nueva novela de Juan Vico, El animal más triste.
Sin embargo, esta novela no sólo habla de sexo, hay sexo en estas páginas, pero van más allá de un encuentro carnal. Aquí se indaga en las frustraciones, en el devenir de los años y en la insatisfacción. Juan Vico parece beber de las reglas de la felicidad de Schopenhauer, aunque no lo haga ninguno de sus protagonistas; de hecho, El animal más triste podría ser el perfecto manual de cómo no conseguir la felicidad por establecer metas que conducen a un estado de frustración Permanente.
Un grupo de amigos que ronda los cuarenta decide reunirse en una casa de campo en un valle inquietante. Allí, el halo del fracaso se muestra como un huésped más. Esta disforia vital planea sobre este encuentro de viejos conocidos que han intentado refugiarse en el arte para no sentir el peso de sus frustraciones.
Sin embargo, no acaba aquí esta historia. Ya que esta reunión de amigos es sólo la primera parte de la novela. La segunda se compone del manuscrito de Paula, la novia de uno de los amigos y la más joven del grupo. El animal más triste concluye con una tercera parte en la que el resto de los personajes cobran voz. Una disección recalcitrante y que da respuesta al hilo de la trama.
