Si hay una cosa clara en este arranque de 2022 es que nos encontramos ante un año que promete ser histórico dentro de la historia del pop español. De este hecho se encargan discos como Ultramonte, de Pablo Und Destruktion, el trabajo más ambicioso de toda su trayectoria.
Qué: Disco (Humo Internacional)
El asturiano Pablo Und Destruktion nunca da pasos en falso. Y ahora lo reafirma con Ultramonte, un álbum que lo eleva definitivamente a un estado de eternidad prematura dentro de la cosmología pop española. Un nuevo hito macerado por un maridaje grandilocuente entre el acervo nacido de la ética Neue Deutsche Welle, con el retrovisor apuntando en Einstürzende Neubauten (tal que en Lobito, el single de adelanto), y el ADN astur que recorre el despliegue de detalles como las gaitas que suenan a lo largo de esta docena de canciones de sangre, vísceras y arrebato melódico.
Esto último sucede en su fabuloso dueto con Fee Rega en Esos fueron los días, uno de los momentos angulares sobre los que avanza tan inspirada oda a la creación visceral. Eso sí, medida con la inteligencia del último Nick Cave, referencia sempiterna en todo lo que hace el asturiano. Aunque no nos engañemos, si a algo suena realmente este disco es a Pablo Und Destruktion.
No es para menos con detalles como los riffs serrados con virulencia en Culpable. También con las cuerdas que flotan sobre sus palabras en dicha canción definen la mirada en cinemascope que Pablo Und Destruktion ha forjado en este álbum. Uno en el que su recitado tenso vuelve a recordar a los tormentosos y siempre reivindicables 713avo Amor y las canciones avanzan, endemoniadas, bajo la luz bipolar de un testado devorador de luz y miedo por los tiempos oscuros que nos está tocando vivir, magistralmente representados en el aterrador vídeo de Lobito.
Atención especial a El salto de Charly García, un sentido homenaje al genio porteño que toma como punto de partida aquel salto que hiciese años atrás desde un séptimo piso resultando ileso. En la canción, Pablo dice cosas como: «Voy a volver a saltar como Charly García, voy a volver a reír y cantarle a la vida».
