Jorge Martí, el vocalista de La Habitación Roja, desvela en Canción de amor definitiva, su debut en la literatura de la mano de Plaza & Janés, que a veces es difícil distinguir novela de vida con una biografía que recorre en paralelo su vida con las nuestras.
Qué: Libro (Plaza & Janés)
Al leer el libro de Jorge Martí nos viene a la cabeza aquel tema del Sr. Chinarro, Quiromántico, que la banda revisó en un EP de versiones: las líneas de la mano como guía para descubrir el futuro con miedo a que vuelva el colapso, para afinar el pasado con guitarras eléctricas y para saborear el presente como si cada edad fuera dorada.
Un día en la vida de Jorge Martí puede tener forma de canción perfecta y público entregado, de pasos silenciosos tras una guardia al entrar en el dormitorio conyugal en Noruega o, simplemente, recordando aquel instante en el que el aire faltó y el averno le propuso bailar.
Jorge Martí con Pau Roca –guitarrista de La Habitación Roja– descargando sus amplificadores para tocar en La Casa del Loco, mientras José Lapuente –mánager– y Pedro Vizcaíno –responsable de su primera discográfica, Grabaciones en el Mar–, se aseguran de que todo está en orden. Un fanzinero agarra su ejemplar promocional de 4 –el cuarto disco de la banda–, esperando para una entrevista que nunca se llegará a realizar.
Sus vivencias serán las nuestras porque la culpa se reparte y la mayor parte del tiempo no tenemos lo que queremos, solo lo que no podemos esquivar. Química legal y cuerdas de nailon, siempre hay alguien dispuesto a recibir besos de una estrella del pop, aunque algunos sean más especiales que otro. Un compositor que se sentó en la mesa con Luque y Algora, que vio cómo Nacho Vegas dejaba Manta Ray, que supo recordar que las damas más bellas son las que se esconden de The Clash.
Ahora su sol aparece a horas tan diferentes que no parece el mismo. Descargas de adrenalina sobre un escenario y al bajar, distintas generaciones en busca de un futuro tortuoso y, al despertar, con sueño atrasado, abrazar a desconocidos que ve todos los días en su trabajo como enfermero en un centro de personas afectadas por Alzheimer.
De España a Noruega, necesitaríamos una moneda mucho más grande para entender lo diferente que son las dos caras. No esperamos tiempos mejores porque, o han pasado ya o están por llegar. Al leer a Jorge Martí entendemos que la vida es una búsqueda de la más perfecta imperfección posible.