El escritor colombiano Santiago Gamboa publica su nueva novela, Colombian Psycho, un thriller donde retrata la maldad como el principal motor que maneja la sociedad colombiana.
Qué: Libro (Alfaguara)
Santiago Gamboa es uno de los autores latinoamericanos más reconocidos en la actualidad por crítica y público. Su nueva entrega, Colombian Psycho, resulta epatante desde su mismo título: un análisis de todo aquello que alimenta la sociedad colombiana, violencia, maldad y descarnadas radiografías de sexo y sustancias.
Gamboa utiliza armas descargadas para enfrentarse a la realidad, no busca deleitarse en la degradación moral, actúa como el radiólogo de una nación, captura en sus páginas estampas de la situación que asola su país. La suciedad no solo está en la superficie, durante mucho tiempo se ha ido ocultando bajo la alfombra y en los armarios: muertos y vivos se mezclan, sumidos en la desesperación a la que sus políticos y sus cómplices los han llevado.
En un país huérfano de referentes Gamboa, que volvió a su Colombia natal en 2015, tomó la decisión de capturar las distintas instantáneas de su patria, primero con su anterior novela, Será larga la noche (Alfaguara, 2019), donde ponía el foco en la influencia de las iglesias evangélicas en toda la sociedad de América Latina y ahora con Colombian Psycho, donde los mismos personas que protagonizaban la entrega precedente –el fiscal Edilson Jutsiñamuy y la periodista Julieta Lezama–, se encontrarán, tras el hallazgo de unos restos humanos en la zona montañosa de La Calera, al este de Bogotá, en el primer eslabón de lo que parece ser una cadena de crímenes.
La muerte bajo tierra, los huesos que escarban en busca del olvido y la metaliteratura como elemento rompedor, al introducirse el autor y su obra como parte del desarrollo de la trama, hacen de esta novela una de las más impactante de los últimos años. El juego de los espejos, dónde comienza el personaje y dónde acaba el lector, la página del libro o la noticia del periódico.
Y todo con la pluma siempre al borde del abismo de Santiago Gamboa. Negro, todo muy negro. Hablan de Bolaño, también se podría citar los personajes de Lorenzo Silva o la niebla despiadada de Miguel de Unamuno, pero, sobre todo, la actualización de algunos de los elementos que hicieron grande al detective «Perro» Lascano del argentino Ernesto Mallo.
