El compositor, productor y cantante californiano Cuco presenta su segundo álbum luego de haber triunfado con el primero tres años atrás. Un racimo de canciones que reproducen su bedroom pop con guiños a la psicoledia, el soul y nostalgias de los años 70. Atrapa la atención su bilingüismo en algunas de ellas y sus colaboradores.
Qué: Disco (Universal)
Desde Heaven Is Lucid Dreaming, el primer tema de Gateway Fantasy, Cuco nos hace una advertencia: estamos ante un viaje del que no conocemos su destino, «donde el mundo de los sueños y el purgatorio se cruzan». Lo que sí sabemos o creemos saber de entrada son dos cosas: una es que se nos anuncia un álbum conceptual, y dos que es muy posible que sea la reafirmación del talento que el músico nos dio a conocer en 2019 con Para mí.
Las primeras canciones, Caution y Alma, se asumen en primera persona y abordan situaciones de una relación sentimental. Entendemos pues que ese viaje del que nos habla no es otro que uno hacia el universo insondable e impredecible de una relación de pareja. Musicalmente nos encontramos ante un pop electrónico bien armado, con aires funk a ratos, un poco de soul y algunos otros acentos.
Y es que para entender mejor la propuesta de quien en realidad se llama Omar Baños, hay que remitirse a su origen: un angelino de ascendencia mexicana que seguramente creció en casa escuchando dos mundos musicales: el que le aporta su residencia, cercano al rock, la música pop anglosajona y la electrónica; y el que hereda por sangre, seguramente marcado por boleros, rancheras y pop latino.
Artificial Intelligence, uno más de sus doce temas, con un aire muy retro evoca esas instrumentaciones de elaboración orquestal tan comunes en los 70 en discos de Burt Bacharach o incluso Fausto Papetti. Más contemporánea en sonido, la balada Time Machine ajusta su suave instrumentación a la voz susurrante y sugerente de Cuco quien promete a su enamorada mantenerse a su lado. Y Foolish explota las posibilidades rítmicas de la electrónica ofreciendo uno de sus canciones más bailables.
Pero son las colaboraciones lo que más llama la atención de Fantasy Gateway. Fin del mundo, está cantada junto la sinaloense Bratty, otra voz destacada que comparte generación con Cuco. Más rimbombante, Sitting In The Corner cuenta con las presencia de la cantante de country Kacey Musgraves, así como del norteño Adriel Favela. Suena más orgánica, con una guitarra como de serenata soltando sus primeros acordes, y la voz de ella apareciendo para luego dar paso al grito ranchero tras el que acomete él. El sencillo más mainstream del álbum tiene acompañamiento de mariachi y su letra se siente cercana al trap, a su universo recurrente de alcohol y yerba como objetos que dan sentido al mundo.
Fantasy Gateway cierra con Decir adiós, una balada melancólica que contiene una moraleja, con la cual Cuco cierra esta historia de amor donde, al final de todo, la derrota, el fracaso, consigue imponerse sin remedio.