Suma y sigue. En su flamante álbum, Airbag vuelve a demostrar sus poderes con una nueva ración de temas demarcados por su carácter jovial, a la vez que intenso, en su sana demostración de por qué muchos le ven como los Weezer ibéricos.
Qué: Disco (Sonido Muchacho)
Tras muchos años al pie del cañón, defendiendo –conscientemente o no–, la ética indie noventera, no es ninguna casualidad que J participe en un corte como Finales alternativos, donde Airbag parece haber condensado la primera etapa de Los Planetas con el típico trote eléctrico de los Wedding Present de 1987.
En otro hit de tirachinas como Secretos chinos es como si la banda hubiese sido apresada en la onda de los mejores Weezer. Por su parte, en La marmota Phil vuelve a mostrar brío planetario por medio de otro de esos estribillos infalibles. Y sí, ante todo, vitamínicos, con la biblioteca del mejor indie rock norteamericano de los 90 siempre asomando en su ADN.
Con estos mimbres, lo que brota de Siempre tropical es un dechado de melodías donde humor, nostalgia ochentera y energía punk-pop se alían en once pildorazos de efecto directo como Andrea, en la que el grupo malagueño suena como unos Pixies sesenteros o en la deliciosamente ampulosa Surf Riot. Eso por no hablar de la verbigracia acústica con la que se cierra el LP por medio de la bonita Perros y gatos.
En definitiva, no es que haya nada nuevo en su fórmula, ni falta que hace. Eso sí, de lo que no cabe duda es que, en su caso, experiencia es sinónimo de inspiración. Y de esto último andan más que sobrados los miembro de Airbag en su nuevo LP, un álbum redondo, sin fisuras ni altibajos.