El crooner Fabián Acosta se muestra muy feliz por el nuevo cancionero Aperitivo de moda, que puede descargarse en Bandcamp o disfrutarse en las ediciones físicas de Intolerancia (México) y Contrapedal (Uruguay). Montevideo es su centro vital, la ciudad donde pasa la mayor parte de su tiempo, pero el DF mexicano se ha convertido en el sitio ideal para desarrollar el proyecto sónico Max Capote.
¿Qué sonido buscaste para las canciones de Aperitivo de moda?
En primera instancia, debo decir que Aperitivo de moda no es un disco conceptual, o mejor dicho, es un disco no-conceptual. Estoy podrido de ver a los músicos de mi alrededor buscando un concepto para sus discos, como si eso fuese algo importante o les fuera a salvar la carrera. Me harté e hice un disco solamente de canciones. Toda la energía y el tiempo que se gasta en pensar el mágico concepto la invertí en estas diez hermosas canciones.
Si se tiene en cuenta que Chicle, tu anterior disco, es de 2008, podemos estimar que producís dos canciones por año…
Puedo pasarme cuatro o cinco años haciendo un fuckin' disco, pero cuando lo termino es porque está perfecto y me dan ganas de darme un beso en las bolas… aunque no puedo, porque no llego. Soy un meticuloso de mierda con mis discos. Puedo tener toda mi casa y mi vida totalmente desordenada, pero mis discos no.
«Yo vengo de un barrio marginal del Tercer Mundo donde el arte todavía está por encima del negocio»
¿Lo grabaste todo en tu estudio?
Todo, menos las baterías, que las grabé en ese gran estudio montevideano que es Sondor, que es una especie de réplica congelada en el tiempo –en su arquitectura y equipos– del estudio B de la BBC de Londes. Es como entrar al año 1962. Un viaje. El resto sí, lo grabé en mi estudio, y para el masterizado elegí Abbey Road, donde grababan Los Beatles. Soy muy fan de ellos.
México se está volviendo tu segunda casa: viajás muy seguido, tenés fans allá y este disco se publica por el sello Intolerancia. ¿Qué diferencias encontrás entre el público de Montevideo y el del DF?
México es un caldo de cultivo ideal para Max Capote. La otra vez tocamos en el Vive Latino y la gente y yo perdimos el control… eran miles de personas y en un acto de locura extrema me tiré al público y ellos me rompieron los pantalones. No es que quisieran hacerme daño, lo sé, es que querían una parte de mí. Tenemos la suerte de que, Intolerancia, uno de los sellos independientes más importantes de México, nos editó. Nosotros hemos recorrido muchos países del mundo y la gente siempre nos ha demostrado un gran afecto, casi sexual. En México, los adolescentes graban canciones nuestras y las ponen en Youtube. Eso sí, en Montevideo, mi ciudad, son moderados nuestros seguidores y eso me chupa un huevo. Cada pueblo consume la música que se merece o la que culturalmente le da la masa encefálica para entender. No los puedo juzgar, los amo. No tengo apuro: cuando quiera jubilarme hago una cancion de tres acordes que diga pueblo, celeste, pierrot, gorrion y lonja y abro una cuenta en el banco.
Cuando contabas de ese afecto «casi sexual» que te demuestra el público, me vino a la cabeza la primera canción de Aperitivo de moda…
«Y es verdad que tus piernas se abrieron para mí» es la primera frase de este disco… ¡Qué más te puedo decir! Tengo una máxima propia, que dice: «Si la suerte se te abre de piernas, echale tu mejor polvo». Quizás este disco habla sobre eso. Vengo de un devenir muy seductor: la revista yanqui Billboard recomendó a sus lectores seguirme y los Latin Grammy Awards me nominaron como Best New Artist junto al pecho-frío de Pablo Alborán. ¡What a fuck! Yo vengo de un barrio marginal del Tercer Mundo donde el arte todavía está por encima del negocio.
Puedes leer aquí el comentario de Aperitivo de moda
(«Apuesta del Día» del 28/4/2014)
Aperitivo de moda está editado por Contrapedal en Uruguay e Intolerancia en México.