La producción musical Latinoamericana puede dibujarse, reconstruirse a partir de esas particularidades que proponen sus hacedores y artistas. Eduardo Cabra, con una carrera ya avalada en la producción musical, tiene una visión propia para encarar cada álbum que guía en el estudio de grabación.
Cabra, conocido en los escenarios como el Visitante de Calle 13, vela con celo cada entrega en la que interviene, se documenta y se vale de una comunicación estrecha con el artista.
Su empeño no ha quedado sin la mirada de la Academia Latina de la Grabación, la cual lo ha legitimado como uno de los productores con más nominaciones y premios recibidos en las diferentes ceremonias del Grammy Latino, con un total de 32 candidaturas y 21 galardones.
Dialogamos con Eduardo Cabra a propósito de su participación en AM-PM América por su Música, que tendrá lugar entre el 12 y el 18 de junio en la Fábrica de Arte Cubano de La Habana, en un momento en el que la industria musical ya no apuesta por los discos como soportes esenciales y busca en las plataformas digitales y los espectáculos las vías para la promoción.
¿Cómo enfrenta el productor estos nuevos desafíos?
Creo que las canciones son la materia prima de las plataformas digitales y de los shows. Así que el reto para mí sigue siendo el mismo, crear música que tenga una identidad particular.
Lo que sí ha cambiado es la forma en que se comercializan las propuestas… Ahora el foco está en los singles. Trabajar enfocado en singles es chévere, pero lo bueno de un disco es que puedes presentar diferentes emociones y explicar mejor la propuesta. Esto se traduce a tener un mejor show, ya que se presenta una propuesta, no solo un tema.
¿Qué buscas en los discos que trabajas? ¿Existe un método? ¿Pudiéramos llamarlo «Método Eduardo Cabra»?
Cuando empiezo a trabajar en un proyecto, me gusta conectar con la propuesta y sentir que puedo sumar ideas. Me gusta que tengan identidad propia, que me sorprenda alguna particularidad cuando escucho la propuesta por primera vez. Durante la producción busco siempre la buena comunicación. Entiendo que esa es la base. Así que cuando se empieza el proceso hay más palabras e ideas.
Cada cual tiene su método… Hace poco Tweety González dijo que el productor es el equivalente a un director de cine. Estoy de acuerdo. El trabajo de producción es un poco de todo; es un poco compositor, arreglista, diseñador, ingeniero de grabación, ingeniero de mezcla, psicólogo, financiero, músico, promotor, motivador…
«En mis producciones me gusta que el riesgo sea la particularidad, que puedas identificar la propuesta sin tener que ver una foto, que el sonido te diga quién es el intérprete»
¿Cómo llevas esa conciliación estética con el protagonista de un disco? Consiguiendo lograr, de paso, el éxito en producciones como Planeta Planetario (Diana Fuentes), Todo cae (Jorge Drexler), Caja de música (Monsieur Periné), A la mar (Vicente García), Tecnoanimal (Gustavo Cordera) y Nuevo ciclo (Chambao)?
A mí me gusta que la persona o las personas líderes del proyecto se involucren en la producción. Es lo ideal.
Esto parte de la idea de que cuando el productor entrega el «disco» y termina su labor, empieza la defensa de la propuesta. Esto le toca a los que componen el proyecto, y si el trabajo es en equipo, estas personas van a salir a defenderla con más intensidad. Van a luchar por algo que vivieron de principio a fin.
Cuando empieza la preproducción se comienza el debate usando referencias. Mucho se escucha de Youtube o de bandas sonoras de películas para tratar de conectar con las emociones que se quieren presentar. Ahí se inicia el debate y el plan.
Latinoamérica es una fuente inagotable de músicas, ¿no crees que sea conservadora la industria del área cuando muestra sus nuevas producciones? ¿Cómo productor, prefieres los riesgos?
Cuando leo la palabra «industria» me llegan palabras como: fábrica, producción en masa y humo. De todas las artes, la música es la que más se puede comercializar, así que es normal que exista una industria.
Pienso que estamos viviendo un momento donde hay una oferta de música brutal. Esto hace que haya más de todo. Quizás dé la sensación de que la industria está siendo conservadora, pero no, también se está arriesgando en propuestas nuevas. Vicente García, Diana Fuentes y Monsieur Periné son ejemplo de esto.
En mis producciones me gusta que el riesgo sea la particularidad, que puedas identificar la propuesta sin tener que ver una foto, que el sonido te diga quién es el intérprete. Históricamente, toda propuesta memorable tiene una particularidad.
¿En qué punto de expansión está la ya anunciada Casa del Sombrero, una iniciativa de intercambio cultural pensada para grabar discos para distintos artistas y bandas del mundo?
Es un proyecto súper ambicioso que me gustaría que exista en un lugar fijo. Me encantaría participar de un estudio libre que sea centro de encuentros, en el que se pueda documentar todo lo que pase allí. Ahora mismo solo es una idea…
Calle 13 ha sido una banda innovadora en la música urbana de la región. ¿En qué renglón de tus prioridades anida? ¿Piensan regresar a los escenarios pronto?
Calle 13 fue un proyecto increíble que sirvió de mucho aprendizaje. Pero antes de él, la prioridad siempre ha sido la música… Por lo pronto, quiero seguir en la producción y en los próximos tres meses voy a estar trabajando en Trending Tropics, un nuevo proyecto en el que colaboro con mi amigo Vicente García.
Has adelantado que Trending Tropics será «algo completamente nuevo». ¿Nos cuentas fechas o datos imprescindibles como algunos de sus integrantes y detalles de los temas que pudieran estar preparando?
En agosto debo tener todo listo. Vicente y yo estamos trabajando en las composiciones. Va a estar compuesto por cuatro multiinstrumentalistas y va a haber varias colaboraciones.
La idea es enfocarse en la música y gozar en el escenario. En septiembre podría haber más adelantos.
América por su Música es una plataforma de encuentro organizada por la Fábrica de Arte Cubano (FAC) para los profesionales de la música en América Latina, abierta al intercambio con personas de otras regiones que trabajan con la música del continente americano y la ayudan a crecer a través de su visibilización internacional. Cada año sus sesiones profesionales se enfocan en una profesión específica dentro de la industria de la música. En la edición de 2017, que se realiza entre el 12 y el 18 de junio, AM-PM el tema es Producción musical e ingeniería de sonido. A partir de allí se llevan a cabo una serie de entrevistas con destacados productores latinos que publicamos en Zona de Obras por cortesía de América por su Música.