Cinco minutos para todo, pero cinco minutos de inspiración, así quería Mi Amargo que sonara su disco. Economía instrumental, bases y alguna guitarra. Sobre todo el cine, ahí donde el tiempo se detiene y Mi Amargo es el Rey. Caminando por el lado más salvaje de la vida. La Ejecución. Un quinteto titular. No grites o grita con talento.
Mi amargo, un eclecticismo subversivo en la época del mestizaje mal digerido… ¿Hay una de las etiquetas que utilizamos los medios musicales para tu estilo con la que te sientas más cómodo?
Pues la verdad es que no, pero sí sé cómo no quiero que me llamen.
Hablamos de técnicas y de amistades, de proceso de composición, de ordenador o elementos orgánicos para escribir. ¿Cómo produces los temas?
En este disco cambié ya desde el inicio la forma de componer. Si tuviera que explicar algo importante, diría que son canciones con un trabajo previo antes de la ejecución. Siempre tengo la idea en la cabeza, le busco la trama y el desenlace y en el subconsciente me imagino el sonido, como debe sonar, y lo grabo en el móvil y luego lo ejecutamos con un productor.
Dirías que el impulso para tus temas es tóxico o lúdico. ¿La calle propone o la calle dispone?
Es muy lúdico. Yo cuando no me lo paso bien, lo dejo. Creo que la calle es la inspiración para todo el mundo, pero también te digo que la lectura, películas y vídeos de Twitter también me inspiran bastante. Al final salen de la calle por lo tanto estamos hablando de lo mismo.
«Creo que la calle es la inspiración para todo el mundo, pero también te digo que la lectura, películas y vídeos de Twitter también me inspiran bastante. Al final salen de la calle por lo tanto estamos hablando de lo mismo»
El tema con el que abre el disco, Palomitas en el suelo, tiene una acidez casi de Lou Reed y tiene un punto cinematográfico muy fuerte. ¿Qué parte es narrativa y qué parte es real del anecdotario que se despliega?
Pues acertaste: ¡soy un gran fan de Lou Reed! Quería que fuese una canción un tanto infantil porque me gustó y tomé de guía también el disco Miedo de Albert Pla y Refree. Toda la historia es real hasta que se demuestre lo contrario.
Es un disco donde hay una cierta economía instrumental, ¿evitar la saturación de arreglos, hacerlo lo más sencillo posible era para dejar el espacio que se merecía a los textos?
Sí, era mi objetivo, que pareciera que todo se había hecho en cinco minutos pero cinco minutos de una gran inspiración, igual que con las letras.
El fraseo de Mi Amargo. Languidez en las palabras. Vieja escuela en los colaboradores. Palabras casi recitadas. ¿Piensas que no por mucho gritar te van a escuchar con más atención?
Bueno yo intento contar algo interesante y que te tenga atento, ya lo de gritar no sé me viene en la persona, siempre grito ¡ja!
Si tuvieras que sentirte parte de una escena, ¿quién sería parte del quinteto titular con el que saldrías a la cancha?
De portero Carlos Vera Tamarit, defensa mi buen amigo Polanski, repartiendo Zemo Ese, medio centro Wilson Pepe Mujica y arriba un servidor
¿Y en directo? ¿Cómo lo haces?
Creo que el directo es lo mejor del disco. Pienso que es muy bueno porque gusta a muchos públicos y generalmente a la gente le agrada. Solemos hacerlo con Carlos Vera a la guitarra y lo demás digital, pero con mucho retoque de voz en cada canción, además del pequeño cine que montamos a las salas que vamos.
¿Cuál ha sido el último disco que has escuchado y que hayas pensado: «Ya me gustaría sonar así»?
Calamaro, Dios los cría.
¿Qué prefieres, TDK de noventa minutos con un disco en cada cara, LP en vinilo de cuarenta minutos con temas extras en la versión CD o un USB de 90GB?
Yo por edad me quedo con los temas extras en CD.
Disco de oro está editado por Halley Records.