El león Los Fabulosos Cadillacs

(CBS, 1992)
El disco que puso a bailar a un país entero para luego hacer extensivo su contagioso arsenal de ritmos caribeños al resto de Latinoamérica. Pero El león no basó su espíritu festivo en ninguna celebración de la vida per se: sus letras, las más comprometidas de un grupo que hasta entonces se dedicaba a beber cerveza y saltar al ritmo del ska, despertaron la conciencia de un público que a partir de este álbum convirtió a la banda de Vicentico y Flavio Cianciarullo en un nombre merecida y necesariamente popular.

LOS FABULOSOS CADILLACS: la banda sonora de América Latina
En 1985, un grupo de veintiañeros con ganas de divertirse cambió su nombre original –«Cadillac 57»– por otro que años después se inscribiría en mayúsculas en la historia grande del rock latino. Con Gabriel Fernandez Capello –alias «Vicentico»–, Flavio Cianciarullo –alias «Sr. Flavio»– y Sergio Rotman a la cabeza, Los Fabulosos Cadillacs comenzaron su carrera haciendo ska para luego abordar otros géneros al punto de revolucionarlos con las enseñanzas de Sandinista, de The Clash, como manual de operaciones. Después de ellos, géneros como la salsa no volvieron a ser los mismos. Si bien El león es su disco más celebrado, la explosión a nivel planetario llegó gracias a Matador, canción que marcó el espíritu de su tiempo. Pero los Cadillacs nunca fueron tanto un grupo de singles como una gran banda de discos: Rey azúcar (1995), Fabulosos Calavera (1997) y La marcha del golazo solitario (1999) bastan como prueba. El grupo se separó con el cambio de siglo para volver a reunirse en 2008 y confirmar que nadie lo había olvidado: la exitosa reunión que incluyó una gira por toda América también dio a luz dos álbumes, La luz del ritmo y El arte de la elegancia. En 2016 vuelven con La salvación de Solo y Juan, primer disco con canciones inéditas en más de quince años. Actualmente LFC se reúnen para tocar cuando tienen ganas ante grandes multitudes por América.