El pianista y compositor cubano Bebo Valdés murió hoy, viernes 22 de marzo, en Estocolmo (Suecia) a los 94 años. Valdés vivía desde hace ocho años en el sur de España, en la localidad malagueña de Benalmádena, donde también residía su hijo más famoso, el también pianista Chucho, pero sus familiares lo trasladaron a Estocolmo a principios de marzo, ante el agravamiento de su estado de salud. El músico será enterrado en la capital escandinava junto a su esposa Rose-Marie, quien falleció el pasado verano. La familia, repartida entre Cuba, México y España, aún no ha decidido cuándo será el funeral y el entierro.
Bebo Valdés salió de Cuba en 1960 y juró que jamás volvería mientras existiera el régimen castrista. A pesar de su exitosa carrera previa en La Habana, no tuvo reparos en aceptar trabajos «alimenticios» en hoteles para ganarse la vida, hasta que Buenavista Social Club (1994, con Ry Cooder en el fogón) primero y Lágrimas Negras (2002, el proyecto mestizo del flamenco Diego El Cigala) le auparon al sitial que merecía en el mundo de la música. Se mantuvo activo prácticamente hasta el final.