La tercera película del realizador mexicano le valió la pasada primavera el premio al mejor director del Festival de Cannes. Después de proyectarse igualmente en el último Zinemaldia, de San Sebastián, la cinta llega a las pantallas comerciales españolas (en México se estrenó el pasado mes de agosto). Cuenta la historia de un adolescente del México rural cuya vida tranquila se ve sacudida por la llegada de las mafias del narcotráfico. Un filme elegante y veraz, presidido por el sosiego narrativo que, no obstante, maneja recursos violentos derivados de la propia trama.