Muchas de las canciones del último disco de El Hijo, La rueda del cielo, surgen de recuperar algo de una grabación anterior. Todo esto ya ocurría en Capital desierto, de 2019, pero en Burberry parece haberse convertido en una especie de (eco)sistema.
En el cuarto single extraído del álbum, además de citar músicas ajenas (Se telefonando, de Mina-Morricone; In The Air Tonight, de Phil Collins), Abel Hernández canta una letra donde aprovecha versos de su propia canción de 2006, Cabalgar.
Una de las secuencias de la película de Jonás Trueba, Los ilusos (2013), muestra a El Hijo (en su formación de directo de entonces) tocando en vivo Cabalgar durante siete minutos sin cortes para unos pocos amigos, en una casa.
El video-lyric de Burberry que se estrena ahora sigue la misma lógica de la música (ese aparecerse de un pasado incompleto e inquietante) y recurre a esa versión fílmica de Cabalgar, sampleando las imágenes de la secuencia de Los ilusos para someterlas a una brutal tergiversación (a cargo de Juan Carlos Roldán) mediante efectos de glitcheado y aceleración (conservando completa la secuencia original a la velocidad adecuada para que cuadre con la duración de la nueva canción).
A partir de ese nuevo montaje de los planos del pasado, surge otra película que parece funcionar como si la viéramos desde el punto de vista de un fantasma: una mirada desde otra dimensión, para la que no hay pasado ni futuro, e incapaz de sintonizar nuestro espacio-tiempo.