La cantante argentina Gabriela Beltramino estrenará a finales de octubre un álbum en el que expande su sonido luego de una carrera ligada al jazz. Ahora llega La inmensidad como adelanto.
Posicionarse en un género tan particular como es el jazz tiene un riesgo: el de encasillarse en un nicho del cual es muy difícil salir aunque uno quiera. Pero Gabriela Beltramino estuvo rápida de reflejos: luego de afianzarse como cantante en el circuito argentino, y de editar en 2015 un celebrado álbum con estándares de jazz, decidió dar un giro a su carrera antes de que su nombre quedara ligado por completo a una escena cuyos límites siempre quiso cruzar.
La cantante cordobesa, radicada entre Berlín y Madrid, acaba de publicar La inmensidad, último adelanto del álbum que lanzará a finales de octubre, llamado El camello, el león y el niño. Allí despliega su talento vocal en función de sonidos y armonías más cercanas al pop de autora e incluyendo referencias al folclore de su país natal, un sonido que guiará al resto del disco.
El álbum, que será editado de manera independiente, contará con siete canciones inspiradas en el concepto de transformación a partir de la lírica de Así habló Zaratustra, el clásico de Nietzsche.