El joven cineasta dominicano da su triple mortal iniciático en esta producción de factura espectacular, que relata el pugilato entre una sofisticada y sanguinaria banda de ladrones y la policía en el corazón de Santo Domingo.
Qué: Cortometraje
Jean Guerra estudió en Estados Unidos y se trajo la técnica de la cátedra gringa, pero su primer gran salto al vacío tiene como escenario Santo Domingo, su ciudad, con actores dominicanos, equipo dominicano y acento criollo. El gigantesco primogénito de Juan Luis Guerra, que ya había probado su valía en el videoclip y la publicidad, se mete ahora en una auténtica ensalada de tiros en una producción que narra el asalto a una sucursal bancaria y la posterior huida de los ladrones. Con un admirable pulso, Guerra «mete» al espectador en la acción, borda las secuencias de acción y no tolera sobreactuaciones, ni se escuda en recursos facilones: a eso ayuda el buen hacer del actor joven más consolidado del patio quisqueyano, Frank Perozo. Tony Almont, vocalista de los rockeros Toque Profundo, sigue probando su faceta actoral con éxito, bien secundado por otro compañero de profesión, Vakeró. En cuanto a Solly Durán, que ya tiene una pica en la meca hollywoodiense –el año próximo se la verá en Cabin Fever: Patient Zero–, el veredicto es rotundo: culpable… de buenas prácticas interpretativas. El cuerpo pide más cine de Jean Guerra: aplíquese, grumete.