Dentro de mes y medio, Subterfuge edita el álbum debut de Joe la Reina. Ya hay un tema de avance, Somos otros, en el Stereoparty 2014; este mismo que aquí asoma. El clip no es el oficial, asegura el sello en el enlace. No importa. Nos vale.
Pantalla negra y subtítulos karaokeros para las estrofas. Estribillos y puente con imágenes que salpican el negro con tipos en infinita gama de grises: rostros que hacen muecas o cantan. Son Joe la Reina, todos ellos: músicos de Guipúzcoa que residen en la siempre efervescente Pamplona, a los que por edad habría que llamar imberbes si no lucieran más de uno vello facial. Su música tiene un punto melancólico desprovisto de languidez (menos mal, ya tenemos bastantes lánguidos en juego) y letras inquietantes, que no retorcidas ni forzadas: «hemos sido santos, hemos sido dos salvajes, hemos tropezado con el mismo escalón» o «varios de mis yoes hoy llamaron a tu puerta». El disco se llama Bailamos por miedo. Tiene sentido: los movimientos espasmódicos con patrones más o menos repetitivos pueden generar una protección robusta para el aura, que impida el ataque de fuerzas ocultas, y centrifugar al mismo tiempo (con expulsión a larga distancia) la angustia que pudiera asolar el interior de los bailarines. Quizá por eso el vídeo no recurre al color: las neuras de cada cual deben pintarse en la intimidad.