Camila Moreno hace grandes canciones, eso ya lo sabíamos. Pero además es capaz de transmitir lo importante que es la música para mantener viva la memoria y resignificar los hechos de la historia. Todo ello se refleja en este mediometraje, estrenado en exclusiva por Zona de Obras.
Qué: Mediometraje
Su nombre nos llamó la atención hace tiempo, cuando escuchamos por primera vez Millones, canción incluida en el álbum Almismotiempo, que reflejaba a la perfección lo que vivía su país en aquellos momentos. Corría 2010, gobernaba en Chile el neoliberal Sebastián Piñera y Camila Moreno decía claramente y sin tapujos «no todo se compra con dinero». Indudablemente toda una carta de presentación musical y de actitud. La cantautora llegaba a la escena local como una heredera privilegiada de los grandes nombres de la canción de autor chilena como Violeta Parra o Víctor Jara.
Luego llegó Panal, disco en el que el delicioso folk de Camila evoluciona de manera interesante hacia un pop elegante y moderno, con grandes canciones como la que da nombre al álbum, Incendié o la preciosa El amor a las hierbas salvajes. Pero además la artista chilena también tiene inquietudes, y la prueba de ello es Las ruinas del oro, mediometraje que estrenamos en exclusiva en Zona de Obras. En él Camila junto a su banda se traslada hasta la localidad de Las Melosas, ubicada en el Cajón de Maipo, para realizar un registro audiovisual en directo de Panal, bajo la dirección del realizador Simón Vargas, de la productora 3 Tercios. Lo que hace aun más especial a este proyecto es que Las Melosas –antiguo campamento minero alemán que funcionó en la década de los años 30 del siglo pasado– fue utilizado como centro de detención clandestino y de tortura durante la dictadura de Pinochet. La autora lo explica con sus palabras: «Quise transformar este espacio de tortura en algo artístico, en música. La intención es la de recuperar la memoria y darle una resignificación especial. El lugar está lleno de historias de terror, fantasía y realidad. Creemos que la música es una forma de denuncia y también una transformación del dolor en otra cosa».
Las ruinas del oro –con una duración de treinta minutos–, contiene la interpretación de varias canciones del último trabajo discográfico de Camila Moreno y es un valioso documento audiovisual para disfrutar una vez más de su talento, o de descubrirla si aún no se la conoce.